7 el riesgo de sufrir lesiones óseas importantes como es la osteoporosis. Una patología que tiene una elevada incidencia en España, puesto que afecta a una de cada dos mujeres mayores de 60 años.
La vitamina D facilita la absorción del calcio y del fósforo, tan necesarios para los huesos. Los traumatólogos de SECOT reconocen que una buena fuente de vitamina D es el sol, por lo que recomiendan la exposición diaria al menos durante 10 ó 15 minutos. El sol puede llegar a aportar entre un 88 y el 100% de las necesidades diarias del ser humano.
La exposición al sol, que debe producirse incluso en los días nublados, debe ser más prolongada en las personas que tienen la piel oscura, las personas de edad avanzada y en las personas obesas.
Según el doctor Mesa Ramos, “la cantidad de sol a la que se debe exponer un adulto es aquella que provoca un mínimo color rosado en la piel. Esa es la señal del incremento de los niveles de vitamina D, comparable a la ingesta de 10.000 a 25.000 unidades de la misma.
La deficiencia de vitamina D tiene como consecuencia la disminución de la mineralización ósea y puede llevar a que aparezcan enfermedades blandas en los huesos, como por ejemplo, la osteoporosis. Por eso, los especialistas abogan por una dieta equilibrada que contenga carne y pescado y huevo, leche y sus derivados, sobre todo leche enriquecida con vitamina D y también vegetales. Además, es recomendable practicar alguna actividad física y exponerse al sol diariamente.
El doctor Mesa añade que también es bueno evitar la ingesta excesiva de alcohol, fumar o tomar algunos medicamentos. De este modo se paliarán los efectos de la osteoporosis. Una enfermedad que produce incapacidad funcional y que genera, en muchos casos, situaciones de dependencia muy importantes.
Si necesitas más información sobre la importancia de la vitamina D en el cuidado de los huesos, puedes consultar la página de la Sociedad Española de Cirugía Ortopédica y Traumatologoa, www.secot.es .